Decía Leonardo Da Vinci: "La semplicità è l'ultima forma della sofisticazione". Dicho en cristiano "La simplicidad es la forma más extrema de sofisticación". En la publicidad esta frase tiene mucho sentido y existen infinidad de ejemplos.
Como camarero también me ha servido, lograr que una mesa de 8 comensales pidan un mismo segundo supone simplicidad en la cocina y un gran resultado en tiempo y calidad.
Para Volkswagen ésta ha debido ser su máxima en estos dos recientes anuncios. Cuando lo sencillo se hace bien no hay nada comparable. Aquí tenemos dos historias sencillas. Quizás unas ideas simples, incluso obvias. Pero están realizadas tan correctamente que, en mi opinión cumplen por completo su misión.
Os recomiendo que después de ver los vídeos paséis por el blog de Juan Boronat y leáis su reflexión acerca de "El valor intangible de la marca", una muy interesante exposición al primero de estos anuncios.
Vía: Código Visual
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