Hoy os traigo un regalo para la vista, unas gráficas que inspiran tranquilidad y belleza en paquetitos de a 1024 megabytes por segundo, osease, mucho.
Una campaña para la Orquesta Filarmónica de Berlín, con unas magníficas fotografías de Bjoern Ewers desde el interior de los instrumentos musicales.
Y no me digas que te encanta la Orquesta Filarmónica de Berlín porque en realidad jamás la has escuchado. Que te veo la carita de sibarita, que eres de los que me piden el vino en copa fina y siempre dices que no a mi primera recomendación de vino para parecer culto y conocedor de los más variados y ricos caldos vitivinícolas. Pero vamos, yo... mientras lo pagues...